Las polémicas han sido una constante en el Gobierno de Jair Bolsonaro, presidente de Brasil. Prueba de ello han sido varias decisiones con respecto a la pandemia de Covid-19, pero recientemente se dio a conocer que el mandatario habría gastado 3 millones de dólares en leche condensada y 440 mil dólares en chicles.
Hace algún tiempo declaró que no le podía hacer falta la leche condensada en sus desayunos, algo que alimentó la controversia con el millonario gasto.
En una reunión privada declaró que dicho gasto fue para todo el Estado, pero especialmente para las Fuerzas Armadas de Brasil, ya que necesitan una buena dosis de energía y nutrientes. Respecto a los chicles, Bolsonaro también declaró que necesitan una buene higiene bucal, ya que no siempre les es posible cepillarse los dientes.
Sin embargo, se filtró un video donde realiza unas declaraciones en contra de la prensa al indicar «que la prensa se meta en el rabo esas latas de leche condensada».
Bolsonaro prosiguió con su discurso al declarar que reciben insultos y los tratan de nazis y genocidas, además de argumentar que «contra asnos este es el lenguaje correcto».
La Organización Internacional Reporteros Sin Fronteras (RSF) que de los 580 ataques que la prensa sufrió durante el 2020, la mayoría (469) fueron obra de Jair Bolsonaro y/o de sus hijos; algo que sin duda afecta la credibilidad del mandatario brasileño (muchos ya lo tildan de un dictador).