El juego entre Paris Saint-Germain e Istanbul BB por Champions League se vio fuertemente afectado y manchado por un escándalo de racismo que involucró al cuarto árbitro del juego y el asistente técnico del equipo turco.
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Cuando corría el minuto 13 del partido, el rumano Sebastian Colțescu le habría enviado dicho al árbitro central que «echara al negro», tras lo cual se armaron una serie de protestas del banquillo de jugadores del equipo visitante.
Ante tal situación, el árbitro central Ovidiu Hațegan corrió para conocer lo que sucedía, y se encontró con un Pierre Webó que le estaba recriminando a Colțescu por el comentario.
Otros jugadores del PSG como Mbappé y Neymar estuvieron encima de la acción, y reiteraron que no podrían continuar con un árbitro racista. Además, Demba Ba fue otro de los jugadores que salieron a recriminarle al cuárto juez por haber emitido esas declaraciones.
Finalmente los jugadores abandonaron la cancha de juego al minuto 23 y el partido fue suspendido. Hasta ahora la UEFA no se ha pronunciado claramente al respecto, pero se espera que el juego se pueda reanudar en alguna fecha de este 2020.