El Agricultor llamado Kumar, quien reside en uno de los distritos más pobres de la India, lo hizo utilizando sólo estiércol de granja y sin ningún tipo de herbicidas. Lo increíble ocurrió y cosechó 22,4 hectáreas de arroz en una sola hectárea de tierra. Se trata de un récord nunca visto en la producción de este alimento básico para la mitad de la población mundial. Además otros agricultores de la zona están obteniendo grandes cosechas de trigo y patatas de cultivos biológico.

La cantidad de arroz conseguida por Kumar superó el record de 19,4 toneladas alcanzados por el llamado»padre del arroz«, Yuan Longping científico agrícola, por los científicos financiados por el Banco Mundial en el Instituto Internacional de Investigación del Arroz en Filipinas, y logró superar cualquier otra lograda por grandes productores de Europa y América. Pero no ha sido sólo el joven Kumar, sus amigos Krishna, Nitish, Sanjay y Bijay, en Darveshpura, consiguieron también 17 toneladas, y muchos otros vecinos en los pueblos de los alrededores afirmaron haber obtenido más del doble de lo cosechado habitualmente. Esto ocurría hace dos temporadas y aún no ha sido superado.

Los habitantes del pueblo acostumbrados a quedarse sin alimentos en los años malos están de celebración. Las universidades agrícolas estatales no les creyeron al principio. Los agricultores fueron acusados ​​de hacer trampa. Sólo cuando el máximo representante del estado en agricultura, un productor de arroz también, vino al pueblo con sus hombres y personalmente verificó la cosecha del Sumant, fue cuando quedó oficialmente confirmada.

Estos jóvenes agricultores se han convertido en héroes en un estado donde casi la mitad de las familias viven por debajo del umbral de la pobreza, el 93% de la población de 100 millones dependen de cultivo de arroz y patatas.

Mientras que la “revolución verde” que evitó la hambruna de la India en la década de 1970 se basó en las variedades mejoradas de cultivos, pesticidas y fertilizantes químicos, SRI parece ofrecer a largo plazo, un futuro sostenible pues básicamente se trata de abono orgánico y de respetar más la naturaleza. Algo tan simple y fácil de hacer que cualquier país del mundo podría ponerlo en práctica.