La profesora Helma Wardenaar, de Illinois, se comprometió en hacer todo lo que estaba en sus manos para que sus estudiantes aprendieran mediante la experiencia, sobre el mundo que los rodea, por lo que puso manos a la obra para que una estudiante del cuarto año que tiene parálisis cerebral, no se perdiera el tour de dos días planificado por la escuela en donde asisten.

“Tiene parálisis cerebral, lo que afecta a sus músculos, por lo que es difícil para ella caminar. Intentamos no dejar que eso sea una molestia más de lo necesario. La familia Vázquez y yo trabajamos juntos para encontrar soluciones. Todos los años, los estudiantes del 4º año van a acampar. Maggie y sus compañeros de clase estaban ansiosos por ese momento. Sabíamos que tendríamos que unir nuestras fuerzas para asegurarnos de que ella pudiera aprovechar el tiempo en la naturaleza como sus amigos. Yo estaba decidida a llevar a Maggie”. dijo la maestra.

Sin duda esto nos enseña que la vocación de un maestro se nota más allá del las aulas.