Jóvenes de Totonicapán han demostrado que proteger el medio ambiente es solo cuestión de actitud.

Vida Ecológica, Totonicapán es una iniciativa en donde las papas fritas se sirven en hojas de maxán (hojas que usualmente se utilizan para envolver tamales) y hoy tienen un nuevo uso, pues tienen un lugar para sustituir los materiales plásticos.

Las hojas se manipulan para tomar forma de platos. Los platos biodegradables, según estos jóvenes, tienen un valor de Q1.00. «Como objetivo principal en este proyecto pretendemos generar empleo y erradicar el uso de desechables; apóyanos y sé parte del desarrollo de Totonicapán», escribieron los jóvenes en sus redes sociales.

A un costado de la antigua sede de Gobernación Departamental de Totonicapán encontrarás este negocio, el cual es una excelente alternativa viable para no contaminar más el medio ambiente.