En los últimos tres años casi no han brotado crías de pingüino emperador en su segunda zona de reproducción más grande en la Antártida. El inicio de este 2019 parece igual de sombrío, de acuerdo con un nuevo estudio.

Los científicos atribuyen la aguda declinación a las condiciones climáticas que rompen el hielo del mar conectado con la tierra, donde los pingüinos emperador permanecen para reproducirse.

Por lo que la ruptura de una de estas plataformas de hielo hizo que miles de pequeñas crías se ahogaran, lo que causó el abandono de una de las zonas que los pingüinos necesitaban para su reproducción.

Los científicos advierten que esta catástrofe podría ilustrar el impacto que el calentamiento de la Antártida podría tener en un futuro sobre los pingüinos. Si el hielo marino se reduce, tristemente la población de pingüinos emperador podría reducirse entre un 50% y 70%.